Seleccionamos a los traductores que trabajarán en sus proyectos según los siguientes criterios:
– formación académica en idiomas, traducción, corrección y redacción;
– experiencia en la materia;
– calidad de su trabajo.
Naturalmente, ante todo hacemos hincapié en el último punto.
Durante el último año, más del 90 % de los traductores que participaron en nuestros proyectos contaban con un título universitario en Lenguas Modernas (en su o sus lenguas maternas) y casi la misma cantidad (70 %) tenían un máster en Traducción, una de las opciones más extendidas últimamente para quienes quieren realizar estudios de posgrado en sus lenguas de especialización.
Algunos de estos lingüistas han obtenido la certificación del programa American Flagship, un plan de estudios auspiciado por el gobierno estadounidense en el que se trabaja con idiomas imprescindibles del siglo XXI, como el chino, el coreano, el farsi y el hindi. Estos lingüistas certificados cuentan con un profundo conocimiento y un enfoque práctico de sus idiomas de estudio, lo cual les capacita para desarrollar su carrera profesional en el ámbito de los idiomas en este mundo cada vez más globalizado y en constante cambio.
Un porcentaje similar de traductores cuentan con al menos cinco años de experiencia en el sector de los idiomas, de los cuales más de la mitad superan los diez años.